Music for the masses

En una semana me vi dos películas con/ de Ben Stiller. Una incluso la fui a ver al cine sin preguntar e incluso pagué 100 pesos por la entrada. Tonto yo. La otra la vi en la tele sabiendo el final y con algo de culpa. Y las cosas salieron al revés. Qué bueno después de todo. Al cine fui a ver While We Are Young; escrita y dirigida por Noah Baumbach; alguien, podría decir, a quién le tengo mucho afecto. Escribió (junto con Wes Anderson) una película perfecta; The Fantastic Mr. Fox y dirigió y escribió dos joyitas que me alegraron oscuros días: Kicking & Screaming y Mr. Jealousy; sus dos primeras pelis que vi en aquel tiempo (gracias Pablo). Independiente y clásico al mismo tiempo. Retomaba la comedia clásica norteamericana para situarla entre gente como nosotros; igual de perdidos y confundidos con tantas voces y mandatos a los que seguir. En aquellos días otra alma afin, Hal Hartley, nos había abandonado. Hal, un poco más francés él (aunque en Funny Ha Ha de Baumbach quizás se dan la mano) con sus primeras peliculas, Trust y La verdad Increíble, nos reveló un mundo nuevo y sí bien no nos había dado todas las respuestas; por lo menos había planteado bien todas las preguntas. Tanto Baumbach como Hartley (como la comedia americana toda) se plantea la siguiente pregunta: ¿Cómo ser felices? O también, ¿cómo podemos ser mejores? O, ¿Es posible una vida más auténtica? Tan clásico es Baumbach que ahora me acuerdo que The Squid & the Whale también la vi en el cine y con mis padres! Y creo que les había gustado. Creo recordar que salimos del cine todos contentos. En otra nota alguna vez escribiré como mi padre, ya pasado los 60 años, se reeducó a sí mismo viendo todas las temporadas de Friends. La comedia americana como parte de nuestra Educación Sentimental. Bueno, por todo eso fui a ver la última de Baumbach sin preguntar (tal vez por miedo a qué me dijeran, no, mirala en la compu). Y fue una pequeña decepción. Baumbach, pasado los cuarenta él, se mira a sí mismo en una pareja de veinteañeros. La película está llena de parodias, descripción de tics y lamentos por lo qué era y ya no es. Es simpática porque pareciera hablar de un medio social más o menos cercano pero no va más de eso. Así me resonó al menos. Conflictos planteados y resuelto a las parrafadas y escenas histéricas. En fin. Noah parecía más lúcido a los veinte que a los cuarenta. Quizás de eso habla la película. Ni hablar sin embargo que allí estaré para ver la próxima.

Ayer por esas casualidades, después de ver La vida secreta de Walter Mitty en la tele le pregunté a mi sobrino por whatsapp, ¿la viste? No tardó un segundo en responder: Un peliculón! Y tiene una banda de sonido fantástica: Jose Gonzales y Of Monsters and Men entre otros. Qué lindo tener 18 años. Stiller y algunos de sus amigos son cultores del género Comedia Independiente para las Masas. Con más o menos suerte; con más o menos respuesta según los propios gustos. A Stiller en When We Are Young (y en la otra comedia dramática de Baumbach en la que actuó, Greenberg) no le termino de creer cuando hace de persona sensible cool. Le creo mucho más cuando hace de uncool. Como adoré a mi sobrino diciendo de una lo que yo no me animaba. Jua. Esas películas redonditas; con los guiños justos (la entrada al karaoke en Groenlandia es mortal) y personajes que se ríen de sí mismo (Sean Penn fantástico). Pertenece por supuesto al género motivacional; al género estamos para grandes cosas o todo está dentro nuestro, nosotros podemos. ¿Es que acaso no necesitamos que nos lo digan de tanto en tanto? Y si es una película entretenida mucho mejor. Aunque sea un cuento de hadas. Y volví a querer a Jose Gonzales lo que no es poco.

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