Que Feist tiene una voz hermosa no es nada nuevo. Que sus dos discos son increíbles, tampoco. Incluso vale la pena buscar sus colaboraciones (en Dark Was The Night y con Kings Of Convenience, o Broken Social Scene, en sus inicios). Será por eso que este documental decide no mostrarnos nada de eso. En su lugar nos habla de una Feist tímida, reservada, que necesita ayuda para expresar todo lo que quiere trasmitir en sus recitales. Para lograrlo se vale de una mujer que, en mi opinión, tiene el mejor trabajo del mundo: maneja el show de sombras que se proyecta durante el recital. Mediante sus manos, arcilla, pintura de colores; recrea un escenario específico para cada canción. El resultado es sorprendente, pero para un documental nos queda chico. Es cierto que en el ínterin nos muestran partes de las sesiones de grabación de The Reminder, se agradece. Incluso hay entrevistas a viejos conocidos, como Chilly Gonzales o Kevin Drew, nuevamente se agradece. Pero cada vez que entrevistan a Feist se siente la distancia, casi confundida con frialdad. Ese es el tono del documental. Todo lo que muestra es hermoso, perfecto, pero tenía la misma sensación que al estar tras el vidrio de una vidriera. Es una lástima, porque verla en vivo parece una experiencia fabulosa y esto es lo más cercano que tenemos. No me malinterpreten, ver el montaje de I Feel It All, hecho con la suma de varios recitales, por sí solo vale
la entrada, pero da la sensación que había mucho más por explorar.
En una línea: ¡Qué linda es Feist!, pero yo me quedo con «la chica de las sombras».
Gustavo Mellado
Páginas de interés:
Sitio del documental: http://www.listentofeist.com/lawtldn