Sobre Peter Von Bagh se suele contar la siguiente anécdota (sepan disculpar ciertas licencias, y como buenos cinéfilos, permítannos imprimir la leyenda): a horas de tomar un vuelo en algún aeropuerto de USA rumbo a su natal Helsinki para cumplir con algún tipo de tarea, Von Bagh leyendo el diario se entera que un cine cerca de allí, ese mismo día se proyecta una copia restaurada de, digamos por decir: Perro blanco (White dog, 1981) aquel film maldito de Sam Fuller. Peter no lo duda un segundo, suspende su vuelo y se dirige a la sala de cine a ver esa maravilla. Estamos hablando, que duda cabe, de un cinéfilo old school y línea dura. Especie en peligro de extinción si las hay. Una persona que, como dice Olaf Möller en el catalogo del festival, vio todas las películas que hay que ver y las vio dos veces. De la biografía de Von Bagh sabemos que fue director de varios festivales y cinematecas alrededor del mundo y autor de una decena de libros. De su abundante obra como director de cine desconocemos casi todo, lo cual es bueno a la hora de enfrentarnos con ella. Solo vimos Helsinki, forever (2008) una sinfonía sobre la ciudad del título utilizando solamente imágenes de films de la historia del cine finés, que parece, no comienza ni termina con los hnos. Kaurismaki. Parafraseando el mítico documental de Tom Andersen sobre Los Angeles, podríamos hablar de Helsinki plays itself, solamente que en una veta más poética y menos analítica que el film de Andersen.
A veces, los tiempos y formas de un festival conspiran con el seguimiento de un foco en particular, esta vez, creemos, vale la pena el esfuerzo. Piensen que en varios casos, ver una película de este director significa ver muchas a la vez. Von Bagh asistirá al BAFICI para cumplir con sus funciones de jurado y, no esperamos menos, seguramente dará cátedra en las presentaciones de sus películas.
Para saber más sobre Von Bagh y sus películas, conviene leer este texto de Olaf Möller publicado en el catalogo del festival de Rotterdam, en donde se presentó esta retrospectiva con algunos títulos más.
En la foto que ilustra este texto, podemos ver al finadito Matti Pellonpää y a la bella Kati Outinen (¿quizás los mejores actores de la historia del cine?) en Tatiana, take care of your scarf (Pidä huivista kiinni, Tatiana, 1994) de Aki Kaurismäki, también conocido como el Kaurismäki bueno. Entre fineses anda el juego.
M.A.
