Cosmos, de Andrzej Zulawski – Between the Fences, de Avi Mograbi – Entertainment, de Rick Alverson.
Están también las películas incómodas. Que son muy distintas de las malas, o aburridas, o simplemente provocadoras de manera infantil. Me tocaron al menos tres:
Cosmos de Andrzej Zulawski. Adaptación de la obra de Witold Gombrowicz del mismo nombre. ¿Qué decir? Se reconoce el universo de este escritor extraño que no dejó de escribir sobre un solo tema, la escritura y el sentido. Entonces se pueden imaginar una narración que muestre de manera plástica estás inquietudes filosóficas. O no se puede imaginar. Como una comedia de Rohmer pero desajustada, on acid. Ardua.
Between the Fences de Avi Mograbi. El Nani Moretti israelí. Cincuenta mil refugiados de Eritrea y Somalia entraron a Israel. No los dejan quedar, no los dejan irse y permanecen en suspenso en un campo (¿prisión?) de refugiados. Mogravi y un director de teatro montan talleres de expresión en el campo. Donde una y otra vez los participantes escenifican la escena de su detención absurda en el campo. Una y otra vez…
Entertainment de Rick Alverson. Hacía tiempo que no veía un film con un personaje principal que produjera menos empatía. La imposibilidad absoluta de la identificación. O el rechazo como forma reactiva de la misma. Muy distinta (casi en las antípodas) con New Jerusalem del mismo director que es una invitación a querer a sus personajes y sufrir con ellos. Una gran fotografía, una construcción paciente (y penosa) y al salir del cine, extrañados, sabemos que la película va a crecer a medida que pasen las horas.