Home movies. Cine con lo que tenés a mano. Cualquier chica puede hacerlo. Podés crear un mundo casi sin salir de tu casa. Necesitás: una cámara, muchas ideas visuales, algunas ideas sobre la vida, algunas certezas (y un puñado de dudas) sobre tu vida, una buena cantidad de discos, buen gusto al elegir canciones, y saber encontrar el momento perfecto para utilizarlas *. Voz en off, primera persona. ¿Sadie hizo estos videos porque cuándo ella era adolescente no se habían inventado los blogs?
Sadie habla de chicas, y de chicos también, pero menos. Habla del mundo que hay ahí afuera y no le gusta nada. Nos cuenta que querría ser Eric Estrada y salir con su moto a levantar chicas.
Nos dice que salió con ella a dar una vuelta en auto, mientras tanto vemos su mano empujando un autito de juguete sobre la alfombra. Sus manos aparecen todo el tiempo. Los bordes de su cara, diferentes peinados, tatuajes, perfiles ajenos y cercanos. Sadie se trasviste. En un corto tiene barba. En otro se pone crema en la cara y se afeita. Habla de sus chicas con una devoción (y tono de que ya están en su pasado) que nos dan ganas de conocerlas a todas.
No están en digital con definición de putísima madre. Están con definición de caset roto, cómo si vieras una transmisión codificada en un televisor de los 70.
J. Pérez
* Dijo Víctor: lo único que espero es que la neocrítica palermitana no empiece a hablar de «maridaje» de sonido e imagen.