– Attenberg, de Athina Rachel Tsangari: Athina ya estuvo en el Bafici. Yorgos Lanthimos, su productor y cómplice ya estuvo por Mar del Plata con la imperdible Dogtooth, cercana a Attenberg en tono. La mejor forma de hablar de estas películas es decir que son imperdibles. Para qué más.
http://www.youtube.com/watch?v=O6tNdNlHPUw
– Hahaha, de Hong Sang-soo: el cine de esta particular y personalísimo director sigue siendo de lo más fresco que uno se puedo topar, pese a su insistencia por la repetición de tonos, intenciones y búsqueda temática. Comedia de construcción imbricada, con saltos en el tiempo e infaltable triángulo amoroso. Comedia de relaciones. Comedia que ya desde el título anuncia lo que a uno le va a provocar.
– Oki’s Movie, de Hong Sang-soo: con su segunda película en un año prolífico, Hong la sigue rompiendo. Otro triángulo amoroso, cineastas y la posibilidad de que la reconstrucción de una historia sea la deconstrucción de la misma.
– Ivory Tower, de Adam Traynor: Peaches, Feist, Tiga y Chilly Gonzalez. De envidiable line-up a rabiosa comedia con karma de tapada. Tiga y Chilly son dos hermanos enfrentados por el ajedrez, uno extremadamente competitivo y el otro en una especie de estado zen, iluminado por la certeza de que el deporte y su tablero son lo que le dan cohesión a la existencia misma. El enfrentamiento se vuelve inevitable, sobre todo cuando está en juego el corazón de Peaches. Escrita, producida y musicalizada por Gonzales, sello de garantía, desparpajo de por medio. http://www.youtube.com/watch?v=5tER1q0IWxM
– Le quattro volte, de Michelangelo Frammartino: Los días transcurren lentamente en un vistoso pueblito italiano. Un pastor saca a sus animales a pastar y comienza un recorrido por el ciclo de la vida, con la transformación como eje ineludible. Nada se pierde. Con un hipnótico pulso, Frammartino demuestra que el laconismo tiene acción, con un contemplativo viaje que une animales, vegetales y seres humanos, siempre desde afuera, involucrándose con un ojo sagaz. Es probable que no haya en esta edición del Festival ninguna escena más brillante que la del perro jugueteando en medio de una procesión. Suena cursi, a lugar común, a sacárselo de encima, pero realmente uno no puede evitar pensar de qué forma utilizar la palabra “poesía” al referirse a esta película.
– Essential Killing, de Jerzy Skolimowski: un talibán capturado, torturado y fugado. Bosque y estepa nevada. Desesperación y la paranoica certeza de que están ahí. Skolimowski –un director de esos que siempre supieron qué, cómo y cuándo filmar- deslumbra con una película de esas que te dejan con ganas de más. No por nada ganó la competencia internacional del Festival de Mar del Plata.
– Meek’s Cutoff, de Kelly Reichardt: una película más de la genial directora de Old Joy, esta vez con un western venido a menos, sin intención de género cinematográfico. Colonos que buscan agua, un tal Meek que más que explorador es un embaucador y la certeza de que uno está viendo a toda una autora en acción.
– Poetry, de Lee Chang-dong: una mujer mayor trabaja cuidando a un anciano para mantener a su nieto, más interesado en dejarse llevar por sus amigotes y hacer travesuras al borde de ser consideradas delitos. La única escapatoria de la mujer será intentar escribir una poesía. Ni más, ni menos. Sí, está entre las imperdibles
– Road to Nowhere, de Monte Hellman: un director de cine, un guión basado en una historia real con final trágico y una actriz misteriosa. Con estos básicos lineamientos, Hellman se las arregla para que nada sea parecido a lo uno haya visto antes. Si bien hubo quien la denominó como un pulp arthouse, lo cierto es que la vuelta al ruedo del director de Two-Lane Blacktop es a la vez una puesta al día de toda una forma de hacer –y comprender al- cine, una arenga en contra de las películas predecibles y una razonable oportunidad para comprobar por qué Monty es reverenciado como todo un autor.
– Tournée, de Mathieu Amalric: nuestro franchute favorito delante y detrás de cámara, en una película oscura, gris, como una nube lluviosa que persigue al espectador. O, más bien, una película radiante, contagiosa, vital. O la intersección exacta. Un grupo de muchachas dedicadas al burlesque y un productor empeñado en triunfar en vez de resignarse ante su clara incapacidad de funcionar. O no. Pufff…
http://www.youtube.com/watch?v=WfMzSuseyDw
– Mammuth, de Benoît Delépine y Gustave Kervern: Depardieu en plan motoquero a punto de jubilarse. Una comedia distinta de a de veras. Obligatoria.
Y dos cortos que hay que ver sí o sí: Get Out of the Car, de Thom Andersen y John’s Gone, de Josh Safdie y Benny Safdie.
Más info en la Guía Encerrados Afuera Para Pasarla Bomba en el Bafici™
Trailer de Ivory Tower: